El lenguaje en el sexo puede ser algo muy erótico: hay a quien le gusta hacerlo en silencio absoluto, disfrutando de la tensión contenida; otros prefieren los susurros románticos al oído; los gemidos y gritos que oyen hasta los vecinos… Pero en este post queremos tratar el tema del lenguaje obsceno, llamado dirty talk en inglés o guarradas de forma vulgar en castellano.
El lenguaje obsceno consiste en utilizar vocabulario vulgar, malsonante o insultante en la relación. Puede estar relacionado con la dominación, cuando insultamos o rebajamos a nuestra pareja, o simplemente con el hecho de rebasar el tabú o límite social.
En cualquier caso lo más importante es saber cuáles son nuestros límites: qué línea no nos gusta nunca pasar. Aquí tenemos que tener claro que cuando estamos excitados nos puede gustar algo que en otro momento consideraríamos insultante. En esto se parece al bondage (que ya hemos visto en otros posts).
Así que tenemos que pensar que lo más probable es que a nuestra pareja no le guste esta práctica hasta que esté excitada, aunque hay a quien la usa para expresar su alto grado de excitación. Por poner un caso: una pareja sale de un restaurante por la noche, están algo bebidos, él tiene un calentón y en una esquina la pone contra la pared y le dice al oído: “Cuando lleguemos a casa te voy romper el culo”.
Por ello lo más habitual es ir de menos a más, empezando por algo suave (“me pones cachondísimo/a”), para ir subiendo el tono (“te la voy a meter hasta el fondo”). Por si acaso necesitáis ideas, estos son los temas más comunes:
- Los genitales y zonas sexuales: Hay muchísimo lenguaje vulgar para los genitales, muy propio de cada país: “Me encanta ver tu coño goteando”, “tus tetas me ponen a cien”;
- Describir la situación: “te gusta que te agarre la verga así, verdad?”, “te voy a follar”;
- Descalificativos: Puta, guarra, cerdo, cabrón, etc. Habitualmente se añade la propiedad: “mi zorra”;
- Peticiones: “métemela ya”, “chúpamela”.
Por último, sólo comentar que es completamente erróneo que sea una práctica que sólo gusta a hombres. En este link tenéis unas cuantas entradas en las que varios usuarios y usuarias ponen las frases que usan. Y sí, hay mujeres a las que les excita que les llamen “puta”, y no por ello tienen menos autoestima.
En fin, es algo que hay que hablarlo con nuestra pareja. Si no lo vemos claro, lo podemos intentar probar con un juego de rol, interpretando a un personaje vulgar. Así, si no nos gusta, no lo tendremos asociado a nuestra pareja, sino a ese personaje.
