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Hola me llamo Lucía, soy española,pero tengo 33 años en venezuela tengo 50 años, divorciada y sin
hijos. Soy una mujer promedio, tengo poco ligue con los hombres, los que quieren estar conmigo es mas que nada para sacarme dinero, y en una pagina de contacto llamada Badooo fue donde conocí a
Luis, un hombre de mi edad, Venezolano, muy simpático, con el cual hablamos mucho, me gusta su forma de ser y como me trata. Así estuvimos hablando unos meses hasta que decidí conocerlo, estaba
segura que era distinto, no estaba conmigo por sacarme dinero, y quedamos para ir un fin de semana a isla margarita ya que vivo en la pastora caracas. Yo la verdad que ya ni me acordaba la última
vez que había estado con un hombre, quedamos de vernos en playa el agua, ya que él es margariteño quedamos de vernos como decía el sábado a la mañana, ya que Luis es medico terapista corporal
masajista de los buenos manos de seda y acertado para quitar dolores y contracturas musculares ya estaba en mi habitación del hotel coral caribe en playa el agua que lo esperaba, hasta que
llego ne llamaron de la recepción y subio como si se tratara de un caso medico, entonces me apresure a ponerme comoda le abri la puerta, un poco por los nervios y otro poco para que al
verme no salga corriendo como ya me había pasado, "hola luis", le dije, él me miro y vi en su cara picara, el es un tipo de muy buen ver, se cuida mucho, a mi me gusto muchísimo, aparte de que
tenía unas ganas locas de follar, no lo iba a dejar ir, "hola Lucía, que gusto conocerte", me dijo con su acento margariteño, que ademas de ser un hombre muy atractivo, ese acento me hizo
estremecer., y lo primero que hice fue darle un beso en la boca y meterle mano en la verga, si me decía que me fuera por lo menos me quería ir follada, estaba muy cachonda, estaba muy mojada, en
una palabra, estaba muy caliente, me dijo vete al baño y depilate para luego el terminar el depilado con chocolate cuando le toco la verga, me di cuenta que era enorme, pensé que la tenía dura,
pero a medida que nos besábamos, y yo se la tocaba, notaba que si, se le estaba poniendo dura, que era enorme, el me metía manos en mi culo, me lo apretaba, me cogía las nalgas, "arrodíllate
Lucia", me dijo sacando su enorme verga, que yo me lleve a la boca como estaba, desesperada, se la empecé a chupar, casi no me cabía en la boca, pero no me importaba, yo quería verga, y la tenía
ahí, ya estaba en mi boca, él se fue desnudando de cintura para arriba y yo así arrodillada chupando su verga lo fui desnudando de cintura para abajo, mientras luis estaba semidesnudo, yo estaba
desnuda, pero no me importaba, estaba chupando una verga, "vamos a la cama Lucia, quiero comerte el culo", me dijo poniéndome de pie, pero ahí me entro el miedo, ya que yo nunca lo hice por atrás
y me imaginaba que semejante verga me iba a hacer ver las estrellas, pero ya no me importaba nada, me iba a follar, y yo estaba tan mojada que parecía que me hubiera orinada, fuimos a al
dormitorio, el se acostó con su verga apuntando al techo, y yo, estaba tan caliente que me sentía desesperada, así como estaba luis, me subí sobre él y cogiendo su verga con mi mano la dirigí a
mi coño, haciendo que me entre toda casi de una sola vez, casi grito de placer al sentir que me estaban follando después de no se cuanto tiempo, yo me movía como loca, mis tetas se movían al
compás mio, sentía mi coño repleto con esa enorme verga, y me empecé a correr como loca, sentía una sensación de placer como hacía mucho tiempo no sentía, "que caliente que estas Lucia", me dijo
luis al verme correr así, con esa desesperación, "ahora date vuelta que te la voy a meter en el culo", me dijo luis acariciando mis tetas, "luis, por favor, despacio, que es la primera vez que lo
voy a hacer por atrás", le dije con un poco de miedo, él me hizo acomodar en cuatro patas sobre el borde de su cama, "abrite las nalgas Lucia", me dijo, yo me sentí una fulana cuando me abrí mis
nalgas dejando mi ano a su disposición, luis se acomoda detrás mio, y cuando siento que apoya esa enorme cabeza que tiene en su verga contra el agujero de mi culo, a mi me sudaban las manos y los
pies de los nervios, cuando da un envión contra mi culo y siento como su verga empieza a entrar en mi ojete, yo di un grito de dolor al sentir como me estaba rompiendo el culo, "despacio, por
dios, despacio", le decía sintiendo como me iba metiendo su tremenda verga en mi adolorido ojete, "aguanta Lucia, te la estoy metiendo despacio", me decía, y si era cierto, me la estaba metiendo
despacio, pero yo sentía como a cada centímetro que entraba me iba rompiendo mas mi ojete, hasta que me la mete toda el muy cabrón, ya no solo mis manos y mis pies sudaban, el sudor corría por mi
cara al tener semejante verga dentro de mi culo. Yo seguía con mis nalgas abiertas mientras el con mucho cuidado hacía entrar y salir su verga de mi ojete cogiéndome de la cintura y sin dejar que
deje de abrir mis nalgas con mis manos, la sacaba y la volvía a meter, era una follada lenta, suave, el dolor se me estaba yendo, mi ojete se había abierto tanto, que casi no me dolía, hasta me
gustaba como luis me estaba follando el culo, "córrete cariño, córrete dentro de mi culo, que tenemos todo el fin de semana para follar", le decía yo, quería la leche de luis, quería que viera
que era una buena mujer en la cama y que me iba a dejar hacer lo que a él se le ocurriera, que a pesar de todo soy una buena amante. Luis me lleno el culo de su tibia leche que corria
por entre mis muslos