Hablábamos hace tiempo de los aceites para masajes, y ahora vamos a proponer una receta con unos cuantos ejemplos. La idea es coger a nuestra pareja y darle un masaje por todo el cuerpo, lentamente y ver a dónde nos lleva.
Primero: preparar el terreno
Lo de siempre: elegir un día en el que tengamos tiempo de sobra y nos podamos relajar, que no nos llamen, etc. También tendremos que buscar un buen aceite, y preparar el ambiente de la habitación. Especialmente la temperatura, ya que nuestra pareja va a estar completamente desnuda, y unas toallas, para mantener todo limpio y no tener que preocuparnos de nada.
Giselle gets her tits a nice
massage
Dando por hecho que no tenemos una camilla, podemos emplear una mesa o una cama, cuanto más alta mejor para que no nos cansemos al dar el masaje y mantengamos toda la energía para el final.
Segundo: el masaje
Puede que no tengamos ni idea de dar masajes, pero el objetivo no es arreglarle la rodilla a un futbolista profesional. Vamos, que no queremos unos masajes profesionales sino un contacto corporal constante pero variado. Y por supuesto sin hacer daño.
Así que tumbamos a nuestra pareja boca abajo en la toalla, y le cubrimos las partes bajas con otra toalla más pequeña, para mantener un inicio “pudoroso” que podamos ir haiendo desaparecer.
Masajeamos la espalda y los hombros, subiendo y bajando por los brazos. Luego vamos a las piernas, las masajeamos, subiendo poco a poco. Durante todo esto podemos echarle cumplidos al cuerpo desnudo que tenemos delante, buscando que se relaje y se sienta deseada.
Luego podemos pedirle que se dé la vuelta, y hacer algo parecido por delante. Para el final dejaremos la cara interior de los muslos, los pechos y los genitales. También podemos ir haciendo pasadas cortas por estas zonas, para ir subiendo el tono.
Tercero: Lo que surja
Bueno, el final puede ser diverso:
- Si ella está muy relajada, incluso pasiva, podemos masturbarla, y luego llevarla a que se dé una ducha;
- Si está muy excitada y quiere sentir algo podemos seguir dándole el masaje mientras ella nos masajea la entrepierna. Esto puede llevarnos a bajarnos los pantalones y un deep throat en el borde de nuestra camilla improvisada, mientras seguimos con el masaje;
- Evidentemente podemos desnudarnos y resbalar entre los dos, y luego ir juntos a la ducha
El caso es no planearlo, y ver a dónde nos conduce la situación, ya que dependerá de nuestras energías, excitación, etc. Espero que los vídeos os sirvan de ayuda y os animen a darle esta sorpresa a vuestras parejas.