la señora renata me llamo para unas terapias al chocolate 6 en 1 llegue a su residencia de playa en los ranchos de chana en la isla margarita despues del cordial saludo y la sonrisa de agrado procedi a las terapia  mi mano iba un paso delante de sus pensamientos, y se posó en su nalga, ya por debajo de su corto vestido. Seguí todo el contorno de su tanga a lo largo de su culo, para luego tomarla firmemente. Ella suspiró y se entregó a un nuevo beso. 

Mi otra mano la sostiene de la espalda, la atrae hacia mí y la deja sin defensas mientras acaricio su culo. La hago girar y me coloco a sus espaldas, la sostengo por su vientre mientras mi pija, dura como un fierro se clava entre sus nalgas con fuerza. Vuelve a suspirar mientras su mano me busca hacia atrás, me sostiene por mi cintura contra ella. Desde su vientre bajo hasta sus piernas, me sumerjo por debajo de su vestido y vuelvo a subir, por el contorno interno de sus aductores. Ella empuja hacia mí con su culo, ya no suspira, gime suavemente. 
-¿Qué estamos haciendo?- vuelve a preguntar 
Llego a su vagina, siento su humedad por sobre su tanga, la que hago a un lado para sentir en la yema de mis dedos la suavidad de su piel recién depilada, mientras miro en el espejo su rostro contraído y su boca abierta, gimiendo abiertamente. Comienzo a acariciarla, se perfectamente cómo hacerlo y dónde buscar su punto de gozo. Se mueve al compás de mis caricias, la masturbo y ella se entrega a una serie de gemidos que liberan su placer. Me besa por sobre su hombro, su mano busca agarrarme la pija. Me pongo a su lado mientras mis dedos la penetran y acarician con total control de su cuerpo. Se sostiene de mí y me besa alocadamente. 
-cojeme…, por favor cojeme- me suplica 
Y allí mismo, en su cama, frente al espejo decido tomarla. Ella separa un tanto sus piernas mientras yo me preparo. Ella mira hacia atrás, impaciente en espera del asalto de mi pija. 
Puedo penetrarla inmediatamente, pero me gusta manejar la situación, y debo confesar que renata responde perfectamente a lo esperado. Mi verga se introduce entre sus piernas, pero no a su coño, la rozo frenéticamente continuando la masturbación. Ella se retuerce, gime y me ruega 
-cojeme…- 
Al principio es solamente la punta de mi verga lo que se hunde en ella. No hay quejidos de dolor, solamente un extenso suspiro de alivio. 
-¿la sientes?- 
-siiiii- responde ella 
¿la quierés más adentro?- 
-toda…- 
Empuja hacia mí, buscando incrementar la penetración, pero espero ese movimiento y lo acompaño hacia atrás, manteniendo la intensidad. 
-por favorrrrrr- me pide 
En ese instante arremeto contra ella, mi verga ingresa todo lo posible, y ella lanza una mezcla de suspiro y carcajada al aire, que expresa perfectamente el alivio que siente al tener mi pija adentro. Tiro hacia arriba de su vestido, su pantaleta vuela por el aire mientras ella se sostiene de la cabecera de la cama. Ataco con ferocidad su sexo, ella se debate en movimientos y estertores que la elevan en el imprevisto y poderoso goce en una verga dura y caliente, con un tipo que hasta ese momento es un perfecto desconocido. 
 
Sus nalgas estallan en sonidos contra mi piel, sus manos se aferran a su posición. renata está gozando de que la cojan en su cama muchos años sin uso. 
-ayyyy, por favor- gime 
Se contrae, está a punto de acabar, pero no es lo que yo quiero en ese instante. No quiero que todo se desvanezca todavía. Me quedo inmóvil, es ella la que arremete contra mí, con furia, mientras mira hacia atrás, hacia mí, es ella quien devora mi pija con su coño una y otra vez. Pero la sostengo, la inmovilizo cuando mi pija está completamente hundida en ella. 
-por favor, muevete no me tortures- me ruega 
-cabalgame ahora y me acuesto boca arriba con mi verga elevada al cielo- le ordeno 
Ella asiente obediente, está en mis manos y ella lo sabe. Se quita la tanga para quedar completamente desnuda para mí. 
y se sento suavemente con las piernas abiertas, ella de espaldas a mí, se sienta encima de mí y entre mis piernas. Mi verga entró hasta el fondo y de una. 
-ayyyyyyyy- lanzó ella al aire 
Pero no en sentido de queja, fue más bien en tono de alivio. 
-que buena verga, por favor- exclamó 
-es toda tuya- le digo yo 
Me encanta hacerla hablar mientras la cojo, 
Se afirma en mis rodillas, cabalga con fuerza, sus sentones violentos hacen estallar nuevamente sus nalgas. 
-toda mía, toda mía- repite ella 
-¿te gusta coger?- le pregunto 
-si…si- responde 
-¿te gusta mi verga?- 
-me encanta- responde apenas 

 dame por mi culo hasme totalmente tuya

dame verga en mi culito que nunca lo ha probado

Gime poderosamente, sus manos aprietan mis rodillas, señal que el orgasmo está bastante próximo. 
-date vuelta- le ordeno ponte de perrito
Ella obedece ciegamente, se detiene y se da vuelta, ahora se sienta de espalada ami su culo solo para  mí, sus piernas contornean las mías mientras me abraza sin dejar de mirarme. Se sienta con fuerza, para que mi verga impacte en su interior con furia.dandole rico a su ano Sus tetas se aplastan contra mi pecho, mientras mi boca busca su cuello. Ella me abraza, mantiene nuestras pieles en un roce intenso. la perreo alocadamente mientras lanza su orgasmo al aire. luis me has dado por los tres lados  que mas se puede pedir 
 
Acaba intensamente sentada sobre mí, pierde el ritmo y hasta diría que la conciencia. Tiembla y se retuerce, gime y jadea fuera de control. Yo la sigo, me derramo en su interior con violencia mientras gruño de placer. su sexo mana mi leche tibia  Sigue cabalgando sobre mí un buen rato mientras ríe, o contrae su rostro en una alternancia que resalta su orgasmo, largo y poderoso. 
Poco a poco nuestros cuerpos comienzan a aquietarse, mientras ella me besa repetidamente. 
-¿Quién eres?- me pregunta 
-tu gigolo tu masajista - le respondo 

dios que ricura de verga tienes en una hora me sacastes mas orgasmo que mi ex marido en todo un matrimonio

te ganaste bien tu pago y propina